¿Cuán grande es tu amor?
Ojalá y todo el mundo pudiéramos dar el amor que Dios nos da.
Un amor no basado en lo que nos venden las novelas o las películas donde se pinta todo demasiado fácil y lindo, sino un amor completamente magnánimo.
Un amor en donde la renuncia a uno mismo nos traiga paz y dónde el entregar nuestro corazón no solo sea a ratos, sino que sea a cada momento del día.
Un amor magnánimo como el de Jesús, sin prejuicios, sin esperar nada a cambio o sin celos... Un amor completamente libre.
Por eso pido a Dios para que me dé un buen corazón. Un corazón libre y entregado en su totalidad en el para que pueda parecerse aunque sea un poco más a él todo los días.
Que nuestro amor propio y el compartido no solo se quede en la palabra, sino que vaya a lo magnánimo todos los días.
Más que todo, te entrego el corazón
Haz de mi vida un cambio Señor.
Comentarios
Publicar un comentario